Hace tiempo que existe la preocupación de que el café y la cafeína puedan aumentar los riesgos de cáncer y enfermedades cardiovasculares, sin embargo, ha surgido evidencia de beneficios para la salud. Un articulo de revisión publicado en el New England Journal of Medicine revela que el consumo de café con cafeína, la principal fuente de consumo de cafeína, no aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares y cáncer.
Los efectos fisiológicos de la cafeína en el organismo pueden resultar en efectos beneficiosos o no deseados dependiendo de la cantidad de consumo y tolerancia. En el Sistema Nervioso Central puede aumentar el rendimiento mental y la vigilancia debido a un mayor estado de alerta además potencia el efecto de los AINES y el acetaminofén para la cefalea, así como de otras causas de dolor con dosis moderadas de 40 a 300 mg. Estos efectos se han observado en personas que no consumen habitualmente cafeína o después de breves períodos de abstinencia en consumidores habituales. Los resultados de muchos estudios de cohorte prospectivos revelan que la ingesta de café con cafeína se asocia con un riesgo ligeramente menor de melanoma, cáncer de piel no melanoma, cáncer de mama, y cáncer de próstata. En metaanálisis de ensayos de larga duración no se encontró ningún efecto sustancial sobre la presión arterial del café con cafeína, incluso entre personas con hipertensión, posiblemente porque otros componentes del café, como el ácido clorogénico, contrarrestan el efecto de cafeína que aumenta la presión arterial.
La ingesta de cafeína en cantidades elevadas mayores a 200 mg por dosis o mayores a 400 mg por día aumentan la latencia del sueño y disminuyen su calidad. Los síntomas de abstinencia a la cafeína son parecidos al de una gripe y aparecen cuando el sujeto deja su consumo habitual. Las bebidas con cafeína que son altas en calorías, como los refrescos, las bebidas energéticas y el café o el té con azúcar agregada, pueden provocar un aumento de peso en casos donde exista mayor consumo de calorías que gasto de ellas.

Este articulo concluye lo siguiente, para las personas adultas que no tienen condiciones de salud específicas, el consumo moderado de café o té puede ser parte de un estilo de vida saludable. No obstante, la evidencia actual no garantiza que el consumo del café prevenga enfermedades.
Bibliografía
1. Van Dam M, Hu F, Willett W. Coffee, Caffeine, and Health. The New England Journal of Medicine. [internet]. 2020 [cited July 31st, 2020]. Available on: https://www.nejm.org/doi/full/10.1056/NEJMra1816604?query=featured_home
2. Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales. La nutrición y la pérdida de peso: mitos y verdades. [Internet] [citado el 31 de julio de 2020]. Disponible en: https://www.niddk.nih.gov/health-information/informacion-de-la-salud/control-de-peso/nutricion-perdida-peso-mitos-verdades